Encuentro la televisión muy educativa. Cada vez que alguien la enciende, me retiro a otra habitación a leer un libro. Groucho Marx

Hoy he tenido uno de esos días de bajón. He estado toda la santa tarde tirada en el sofá, ojalá os pudiera decir que he estado aburrida (imaginaos lo aburrida que estaba!) Hoy no me apetecía salir a pasear, ni hacer ejercicio -bueno esto nunca- ni leer, ni cocinar...no me apetecía hacer nada.
Toda la tarde a solas con la tele!
Me he tumbado en el sofá y he puesto la televisión. Menos mal que todavía me queda la tele! He visto de todo: primero los informativos de Cuatro. Después los de la Primera. He puesto Tele 5 para ver el resumen de OT. Cuando ha terminado me he pasado al canal Historia y he visto un documental sobre la Era Dorada de la prensa amarilla en Estados Unidos (allá por los años 20 y 30). En el canal cocina me he enterado de cómo hacer unas piruletas de queso parmesano. Ya a las 21:30 Juanmi me ha dicho que quería ver el Madrid-Barça y yo me he venido al ordenador. ¿No está mal, no?



¿Alguno de vosotros cree mi exposición ante el televisor ha podido perjudicar o alterar mi educación?Quiero ahora enumerar algunas ideas que me habéis ido comentado en este Blog en otras entradas:
  • Las cadenas de televisión y su responsabilidad social. Escaparate que modela un trozo de la mente de la mayoría de la población.
Mucho ha cambiado el papel de la televisión con la llegada del cable y el satélite. Y más que cambiará con la llegada de la TDT. ¿Y qué me decís de Internet? De cada vez más la tele se convierte en el soporte necesario para que el espectador pueda ver lo que le interesa. ¿Cuántos de vosotros no os descargáis vuestra serie favorita por Internet para después verla en la televisión? ¿Quién no tiene ya un canal favorito que no es Tele 5 ni Antena 3?
Lo que no nos tiene que pasar es lo que ya les ocurrió -y les sigue pasando- a nuestros mayores con la llegada de las primeras cadenas privadas. Para ellos La Primera seguirá siendo La Primera.
Por lo tanto, NO, para mí, actualmente, las cadenas de televisión no tienen una función social.

  • Dilema entre la libertad de las cadenas a emitir lo que quieren y la libertad del espectador a ver lo que él quiere. ¿Juego limpio por parte de las cadenas? No porque:

  1. Incumplimiento de un código deontológico

  2. Relación dinero& poder: existencia de psicólogos y manipuladores

  3. Telespectador: inocente y elemento pasivo
Pues claro que las cadenas pueden emitir lo que quieran ¿Por qué? Pues porque hoy podemos escoger. Vemos lo que nos interesa, nosotros tenemos el mando -nunca mejor dicho- para cambiar si algo no nos gusta y elegir aquello que nos interesa. Y oferta hay, y mucha (y digo yo que habiendo tantas cadenas de televisión ya me podrían llamar de alguna para trabajar!).



En cuanto al incumplimiento del código deontológico...en Periodismo existe más bien un código moral. Los contenidos de las emisiones siempre dependerá de la ética del profesional (Ditas, existe alguna Ley que lo regule?) Y lo que nosotros no podemos hacer es ir educando a la gente, no podemos enseñarles lo que es y lo que no es ético -porque entonces aquí podríamos abrir otro debate-.



Respecto a la relación dinero& poder, excepto las cadenas públicas, las demás no dejan de ser empresas, negocios que van bien, muy bien, y que son capaces de lo que sea para ganar dinero. Y yo me pregunto ¿No funcionan así todos los negocios?



Y ya el tercer punto, sobre el telespectador inocente y elemento pasivo. Me siento realmete ofendida. Considero que todavía me queda algo de juicio para decidir con qué me quedo, qué quiero ver y para cambiar cuando algo no me interesa. Lo siento pero aunque esté muy de moda llevar pantalones amarillos y en las tiendas no vendan otras cosas, ya me encargaré yo de que mis pantalones sean de otro color.



"La televisión es la verdadera ventana de mi salón,
y yo decido cuando bajar la persiana"



Jéssica hb