14-10-2010
Cualquier noticia que leo relacionada con el rescate de los mineros, atrapados hace más de mes y medio bajo tierra, me pone la piel de gallina. Por fín una buena noticia crea tanta expectación. Sólo siento felicidad por todos esos padres, hijos, hermanos...a los que la mina decidió atrapar, la tecnología consiguió salvar y la Fe, a unos y la Esperanza a otros, les ayudó a soportar.
A mi juicio, todo comentario negativo relacionado con el coste del rescate, con los familiares, con los medios de comunicación y ahora sobre los propios mineros, están de más. Ya están fuera. Acaban de recuperar su vida y su tiempo. Las decisiones que tomen ahora no somos nosotros nadie para juzgarlas.
Sólo les podemos dar la enhorabuena.
Jéssica hb
